Permitite tener días malos

Permitite tener días malos

Todos tenemos, cada tanto, días malos.

Días que pesan,
días que duelen,
días que cuestan. 

Y está bien,
permitite sentirlo. 

 

Muchas veces se piensa que apenas estamos mal, hay que cambiarlo y transformarlo en algo bueno,
“ya, tenés que pensar en algo positivo”.
“Agradecé”,
o algo similar pasa por nuestra cabeza.

Pero cuidado, no confundamos transformar con tapar. 

Por favor, no caigamos en las trampas de la mente.

No se trata de tapar nuestra sombra para quedarnos con la luz, sino más bien es integrar nuestra sombra y así transformarnos.
 

Para realmente transformar e integrar,
hay que sentir,
atravesar.

Y sí, lo sé,
es súper incómodo y doloroso.

Pero tranquilo,
es parte del proceso y está bien.

Frená. Tomate tu tiempo,
tu espacio,
y sentí. 
¿Qué aparece?
¿Qué emoción está dando vueltas?
¿Qué pensamientos?
¿En dónde puedo ubicarlos?
¿De dónde vienen?

Te puede interesar
Cerrar X